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Los procesos constituyentes de Sudamérica: aciertos y errores

Los procesos constituyentes llevados a cabo en nuestra región son variados y cada uno ha tenido aciertos y desaciertos. Como país, es nuestro deber observar estos procesos y sacar provecho de estos procesos y también aprender de los errores que se cometieron en los países que nos rodean.


Ecuador llevó a cabo un proceso constituyente durante el año 2007. Cabe destacar que este proceso no estuvo exento de algunas polémicas, como fue el enjuiciamiento de 4 vocales del Tribunal Supremo Electoral por parte del Congreso Nacional y la posterior respuesta del Tribunal: la destitución de 57 diputados de oposición, lo que en términos prácticos permitió la mayoría oficialista en el Congreso y así aprobar un referéndum nacional. La opción de cambiar la Constitución obtuvo la mayoría, por lo que se llevó a cabo la elección de una Asamblea Constituyente con 130 miembros.


Después de comenzar sus funciones, se le entregaron a la Asamblea plenos poderes, lo cual permitió disolver el Congreso y realizar funciones legislativas. Sin duda estos dos elementos no son dignos de imitar ya que, en primer lugar, el proceso plebiscitario debe llevarse a cabo con todas las garantías y acuerdo entre los distintos poderes del Estado, además de definir los límites en el poder de la Asamblea, la cual se dedica sólo y únicamente a la elaboración de una nueva carta fundamental.


El proceso ecuatoriano, eso sí, tuvo grandes iniciativas que terminaron siendo plasmadas en la Constitución. Un elemento importante es el reconocimiento de la herencia originaria de los pueblos que habitaron el territorio antes de la época colonial, otorgándoles el debido respeto y construyendo un pacto social que incluya elementos de reconocimiento de los distintos pueblos que forman la sociedad ecuatoriana. Además, la intención de integrar y reconocer la coordinación y la intención de cooperar con otros países latinoamericanos para mejorar las relaciones tanto económicas como a nivel social son buenos elementos que se rescatan de la Constitución ecuatoriana.


Otro proceso constituyente que se llevó a cabo durante la primera década de nuestro siglo es el proceso boliviano. Este proceso fue bastante transparente, con elecciones de asambleístas en las que participaron distintos partidos y movimientos del espectro político. Luego de las elecciones, el movimiento de Evo Morales no obtuvo la mayoría para superar los 2/3 de quórum, por lo que tuvo que (durante la elaboración de la nueva Constitución) pactar con la oposición y llegar a acuerdos, proceso no muy distinto a lo que se espera que suceda en Chile. Esta Constitución fue finalmente aprobada vía plebiscito nacional, a través de un proceso ejemplar de elección, elaboración y ratificación.



Si bien la Constitución puede causar división a la hora de ser interpretada y estar cargada de cierta ideología por parte de quienes la promovieron, posee algunos elementos admirables y a considerar para nuestro proceso constituyente.


En primer lugar, la Constitución boliviana posee un claro reconocimiento de los pueblos originarios, los que componen un gran porcentaje de la sociedad boliviana. Si bien en nuestra composición la población aborigen es cercana a un 13%, es un número a considerar y reconocer en base a su posición de primeros habitantes de nuestras tierras. Por otra parte, la Constitución establece gobiernos locales autónomos y legitimados por votación popular, lo que aún en Chile es materia de debate en cuanto a qué tanta autonomía se les entrega a los gobiernos regionales y locales. Otro aspecto importantes son los derechos: se reconocen algunos servicios básicos como el agua y el alcantarillado como derechos humanos, lo que obliga al Estado a garantizar a través de distintos mecanismos el cumplimiento de estos derechos. También se entiende al Estado boliviano como “pacifista” que rechaza la guerra, junto con el reconocimiento de 36 lenguas oficiales junto con el español, lo que refleja la pluralidad en la composición de la sociedad boliviana.


La experiencia ecuatoriana y boliviana nos aportan elementos fundamentales para un proceso constituyente ejemplar y democrático. Por una parte, es necesario aprender de los errores cometidos por los países, marcando límites en la institucionalidad y en el respeto al ejercicio del poder por distintas instituciones estatales. Por otra parte, el aprendizaje sobre los elementos que componen estas constituciones son relevantes y enriquecedores para el debate sobre qué aspectos claves son necesarios considerar para una posible adición de estos a la nueva Constitución que se comenzaría a elaborar a fines de este año. Los aciertos y errores de los países de nuestra región son ejemplos para un proceso ciudadano, informado, libre y limpio para nuestro país.



¡Ten un debate ciudadano respecto a este tema!


Indicaciones: Para poder desarrollar este contenido con un grupo de discusión y reflexión. Es recomendable que una persona asuma el rol de "facilitador/a", este rol tiene como tareas claves proponer las preguntas, motivar a la participación de las personas en la discusión, moderar los tiempos para propiciar un espacio interactivo en el que todas las personas puedan participar. Se recomienda generar un espacio circular con sillas, en donde se invite a mirarnos, lograr acuerdos e identificar desacuerdos.


Se recomienda tomar acta de las ideas centrales de la discusión, con el fin de compartir posteriormente con los participantes. Si esto se lleva a cabo en una comunidad educativa, sería interesante compartir las ideas con otros actores de la comunidad.


Fuentes:

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