En el marco de Innova Fosis 2024. Participación ciudadana y gestión de emergencia y desastres.
En un contexto global donde los desastres naturales son cada vez más frecuentes y devastadores, la preparación y resiliencia de las comunidades se posicionan como factores esenciales para enfrentar estas emergencias. La reciente iniciativa del proyecto Comunidades Activas de la Fundación Observa Ciudadanía (en el marco de Innova Fosis) en la Región de Los Ríos, que busca fortalecer las capacidades comunitarias para la identificación de recursos locales, representa un ejemplo inspirador de cómo la participación ciudadana puede transformar las políticas de gestión de riesgos en soluciones efectivas y sostenibles.
Este enfoque destaca la importancia de involucrar activamente a las comunidades en el diseño e implementación de estrategias de preparación para emergencias. La experiencia demuestra que cuando las personas son participantes activas en estos procesos, no solo se apropian de las soluciones propuestas, sino que también se genera un tejido social más fuerte y cohesionado. Este sentido de pertenencia y empoderamiento es fundamental para construir resiliencia en los territorios.
La iniciativa Comunidades Activas avanza en la dirección correcta al priorizar el fortalecimiento de capacidades locales, un aspecto crucial en la gestión de desastres. La identificación de recursos comunitarios no solo permite aprovechar mejor los activos existentes, sino que también fomenta el trabajo colaborativo entre vecinos, organizaciones y autoridades. Esto no solo mejora la respuesta ante emergencias, sino que también contribuye a la prevención, reduciendo la vulnerabilidad del territorio.
Sin embargo, este tipo de proyectos no solo debe ser una estrategia aislada. Es indispensable que las políticas públicas en torno a la gestión de emergencias consideren la participación ciudadana como un eje central, no como un complemento. La construcción de comunidades resilientes requiere un esfuerzo sostenido y articulado entre el Estado, las organizaciones locales y los propios ciudadanos. Es necesario diseñar programas que integren educación cívica, capacitación técnica y ejercicios prácticos que permitan a las personas actuar con eficacia durante una emergencia.
La Región de Los Ríos, con su riqueza natural y sus desafíos específicos, demuestra que la clave para una respuesta efectiva no está solo en las infraestructuras o los recursos materiales, sino en el compromiso y preparación de las personas que habitan el territorio. Iniciativas como Comunidades Activas nos recuerdan que la participación ciudadana no es solo un derecho, sino una herramienta esencial para transformar desafíos en oportunidades y construir un futuro más seguro y resiliente.
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